viernes, 10 de junio de 2011

Trabajo Final

Recorrido por el Centro Histórico












Quizá en México tengamos varias Ciudades de Dios.

http://www.youtube.com/watch?v=NmkwG7ux3l0


La ciudad de Dios se convirtió en el lugar a donde el gobierno siempre mandaba a todos -los pobres- con cualquier motivo. Se derrumbó mi casa, invaciones o demás, la Ciudad de Dios estaba ahí para ser el recipiente de todos aquellos que no cabían en la ciudad que no era de Dios.


La película de Meirelles es un cruel reflejo de la realidad de l as fávelas en Brasil, en donde comerciar con drogas se vuelven el negocio más redituable y la manera más rápida de conseguir además el respeto en los bajos mundos.



Como les dije, no soy pirata de jueguito.

Reflexión basada en, Degraded Images, Distorted Sounds-Nigerian Video and the infraestructure of piracy.

La calca, decía Deleuze, nos pasamos la vida entera haciendo calca, reproduciendo lo que ya se produjo. Copiando siempre, copiando todo.


Quizá esté en nuestra naturaleza, en nuestras ganas de ser siempre mejores, cuando creemos que ser mejores es tener un bolso Chanel, que en el mercado de la piratería puede ser desde una ganga de 50 pesos hasta un Clon de unos mil, que igual no deja de ser una calca de aquello que deseamos. 


La piratería es el negocio que ahora es, gracas a esas ganas insaciables de ser vernos mejor en comparación al otro. Aunque lo pirata, casiisiempre dice a gritos, serlo. Es decir, su "calidad" jamás igualará al original. 

Soy pirata y no me llamo Garfio.

Basado en Media Piracy in Emerging Economies.


Y tampoco tengo uno, hablando de garfios. Hablando de piratas mejor, seguro lo primero que viene a nuestra mente cuando decimos piratería, es Discos y películas piratas, todos ellos de pésima calidad si cuestan entre 10 y 15 pesos. Pero si son tan malos, ¿qué hace que sean un buen negocio? Y otra vez, la pobreza aparece como el mal de los males, lo altos precios no permiten que la gran mayoría de la gente no pueda tener acceso a las creaciones -en ocasiones- artísticas, ni del séptimo arte ni las musicales.


Y ante los altos precios, comprar un disco en el tianguis del viernes o del martes o de cualquier día, se vuelve la única opción para poder obtener entrenimiento a bajo costo. Pero, ¿es esto bueno? Quizá tenga miles de justificaciones, pero por donde se le vea, este es un problema que afecta a la producción de arte, que para muchos puede ser insignificante, pero entre menos redituable  sea producir cosas de calidad, menos calidad habrá en lo que se oferta en la industria del entretenimiento.


Calidad, y calidad a bajo costo, quizá una de las grandes paradojas, pero no  imposible. La industria de la producción ha ido encontrando alternativas, quizá no tan lucrativas pero sí buenas, entre ellos el itunes. Que lucha contra la piratería del tianguis y la pirateria que hacemos cuando bajamos nuestras canciones o películas por internet, así todos hemos sido piratas alguna vez, y piratas en serio... no jugando.

Comunicación y poder, Manuel Castells

La fila era enorme, estuve en ella por casi una hra. para luego ser trasladada a una sala en donde transmitirían la conferencia de Manuel Castells en vivo. Y después de una improvisada sede externa de la conferencia, Manuel Castells hablaba sobre la comunicación en el siglo XXI y los movimientos sociales, hablaba de las redes sociales en específico de Twitter y de los conflictos en Medio Oriente y de la comunicación como posibilidad de información para poder entender los problemas y ser consciente de la realidad.

La represión de los medios de comunicación fue también un tema, en el cual ahondo lo suficiente, como para darnos a entender que la libertad de expresión y el libre flujo de la información, permite nuevas formas de poder o bien, su inmovilidad.

Cuando no hay de otra.

Basado en "The Street Vendors of Bangkok, Alternatives to Indoor Retailers at a Time of Economic Crisis". de John Walsh


Ser ambulante no es algo que digas cuando te preguntan en el kinder, qué quieres ser de grande. Ser ambulante es el resultado de todo un cúmulo de imposibilidades, de ofrecer empleos, de encontrar los pocos, de la pobreza crónica, de no terminar los estudios, de una y mil cosas más, pero es muy seguro que no es algo que un niño del kinder dibuje como profesión.


Quizá no sea un orgullo y quizá giren miles de mitos y de malos comentarios con respecto al comercio informal, pero no todo ello es malo. Es dañino con el ambiente urbano, sí, innevitablemente, pero sería más dañino tener la calle con 25 mil delincuentes más de los que ya hay. 


Y sí, yo quería ser cantante.